La pieza de software más fundamental para cualquier programador es el editor de texto. Es la aplicación que utilizamos diario, hasta para el cambio más mínimo (algunos cambios se pueden hacer con aplicaciones desde la terminal, pero supongamos que no).
En 1998 tuve mi primer computadora y en 1999 empecé a programar, mi primer editor de texto fue Notepad (hasta 2004), luego de unos años cambié a Notepad2 (hasta 2007), hasta que salió a la venta E text-editor (hasta 2009) que era un clon de TextMate pero para Windows, luego que pasé a OS X empecé con TextMate luego TextMate 2, continuando con SublimeText 2 , SublimeText 3 y el último que probé fue Atom , incluso escribí varias extensiones y mande varios PR a repositorios que son parte del “core” de Atom (link a mi cuenta de usuario Atom ), me gustaba tanto la idea que hasta soy moderador de los foros de Atom.
Seguía utilizando SublimeText 3, estaba muy contento, pero el desarrollo de la tercer versión está un poco detenido y me he desanimado, por lo que con el lanzamiento de Atom 1.0 (un editor que he utilizado desde su primer versión pública) quise darle una oportunidad más para reemplazar SublimeText 3 pero me ha defraudado, la verdad quiero amar a Atom pero creo que todavía no es el momento para confiar 100% en este editor. Todavía las tecnologías web con las que fue creado no estan a su máximo y el desempeño deja mucho que desear.
Estando en la crisis existencial de no poder confiar en el futuro de SublimeText 3, aparte de que se empezaba a tardar a la hora de abrir directorios completos y sin poder confiar en Atom, he tenido que salirme de mi zona de confort de los editores de texto “modernos” y utilizar Vim . He intentado utilizar Vim desde hace mucho tiempo, antes de cambiar de editor de texto siempre le daba una oportunidad, pero la verdad estoy muy acostumbrado (aún) a las interfaces gráficas y tener todo disponible a un click y Vim tiene un enfoque diferente. No voy a entrar en la discusión del por que Vim y por que no Emacs, pero creo que ya era necesario hacer el cambio de una vez por todas. A pesar de ser un editor de texto más viejo que los anteriores que he utilizado, tiene mejor desempeño que todos ellos juntos y gran soporte de la comunidad. Es una pena que no exista ningún editor de texto que pueda destronar a Vim o Emacs con tecnologías modernas.
Para hacer el cambio lo más sencillo posible empecé con MacVim para seguir teniendo poco de lo que estoy acostumbrado, como soporte para las pestañas “tabs” y mouse, en lo que acostumbro mis dedos a los atajos y termino de configurar Vim a mi gusto.

Dejo un enlace a mi archivo .vimrc
donde voy a estar actualizando mis cambios conforme vaya utilizando más Vim y vayan saliendo todos los detalles que extraño o que estoy más acostumbrado a utilizar a la hora de editar texto.